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MISES, INTROSPECCIÓN y NEUROECONOMÍA

La realidad es una construcción cerebral demasiado compleja como para analizarla sólo con teorías introspectivas

¿Quién fue Mises?

Entre las décadas de 1920 y 1930, el destacado economista de la escuela austríaca, Ludwig von Mises, abanderado en la lucha intelectual contra el socialismo, escribía una serie de controvertidos ensayos, donde criticaba y rebatía fuertemente los intentos neoclásicos de reducir la conducta humana a los métodos físicos de las ciencias naturales, argumentando que dichos métodos distorsionarían cualquier comprensión real de la toma de decisiones y de las actividades humanas, y además crearían una grave falsa impresión de que los procesos sociales y del mercado podían manipularse y controlarse más o menos de la misma manera que la materia inanimada en un experimento de laboratorio.

Mises e Introspección

En su obra más famosa La Acción Humana, explicaba que todos los procesos sociales tienen su origen y pueden reducirse a acciones y reacciones de seres humanos individuales, donde el científico social puede utilizar una fuente de conocimiento de la que no dispone un científico natural: la introspección. Es decir, el científico social puede mirar en su interior y apreciar las características lógicas y formales de sus propios procesos mentales, y de esta forma comprender lo esencial de la acción humana.

De esta forma Mises, a partir de su propia introspección como científico social, construye toda su teoría de economía liberal. El punto es que el argumento de la introspección ha sido muy importante en Ciencias Sociales, pero claro... hasta antes del boom de las últimas décadas de las Neurociencias Cognitivas, que permite analizar con mayor grado de precisión procesos decisionales individuales, y dejar de confiar tanto en procesos introspectivos de científicos sociales "iluminados", cuyos poderes introspectivos podrían ser muy altos, pero quizás llegar a no concordar con otros destacados introspectivos dentro de disciplinas similares, como Keynes, por citar otro destacado.

Neurociencias: no hay única realidad

Para las Neurociencias Cognitivas, hace tiempo que está clara la noción de que la realidad es una construcción cerebral individual, tanto en el plano de las ideas como de las percepciones de los sentidos (olfato, gusto, vista, tacto y oído), lo que origina las fuertes divergencias que vemos entre las personas sobre gustos, preferencias, opiniones, enfoques teóricos, etc. De esta forma, los significados que otorgamos a objetos, hechos y procesos sociales están teñidos por los mapas mentales que construimos y reconstruimos permanentemente en nuestro cerebro, como resultado de nuestro propio aprendizaje y experiencia. Es decir, la introspección de algunos destacados científicos sociales, como puede ser Mises, corre severamente el riesgo de no concordar con la introspección de otros, simplemente porque los procesos humanos internos y externos no son percibidos igual por todos en todo tiempo y lugar.

"La realidad es algo relativo e ilusorio", nos dicen Capra y Steindl-Rast en su libro "Pertenecer al Universo" (1993). Está comprobado, con bases anatómicas, que actuamos de manera ingenua cuando creemos que aquello que percibimos es la realidad absoluta. Lo que percibimos como realidad, en este caso Mises u otro científico social, es simplemente una interpretación personal de una parte de la realidad. Pero, por sobre todas las cosas, percibimos la realidad a partir de nuestros deseos, y fundamentalmente, de nuestras creencias, haciendo que los datos elegidos racionalmente (para justificar nuestras decisiones) terminen encajando con lo que queremos percibir.

Neuroeconomía e Introspección

La Neuroeconomía hoy propone un camino verdaderamente disruptivo tanto a la Economía Neoclásica como a la Economía Austríaca: avanzar en el componente empírico de la Ciencia Económica a partir del análisis de como los agentes económicos forman sus valoraciones subjetivas y toman sus decisiones basados en la química y el funcionamiento cerebral. En palabras más simples, tanto al homo economics neoclásico como a la introspección miseana hay que testearla con neuroimágenes y demás herramientas de las Neurociencias Cognitivas.

Dice Paul Zak, destacado neuroeconomista: La Neuroeconomía es un campo transdisciplinario emergente que utiliza técnicas neurocientíficas para identificar el sustrato neuronal asociado a las decisiones económicas. “Económicas” debe ser interpretado aquí en el sentido más amplio, como cualquier proceso decisional (humano o no humano) que se da por la evaluación de alternativas. 

Según Kevin McCabe, otro destacado neuroeconomista: La Neuroeconomía es un programa de investigación interdisciplinario cuya meta es construir un modelo biológico de la toma de decisiones en ambientes económicos. Los neuroeconomistas se preguntan ¿cómo el cerebro corporalizado permite a la mente (o grupo de mentes) tomar decisiones económicas. 

Más de Mises

Volviendo a Mises, sostenía el destacado austríaco que las “leyes” de la economía no están abiertas a verificación cuantitativa o falsación o predicción. En otras palabras, las leyes de la economía, son relaciones lógicas, no empíricas, cuya lógica se deducen introspectivamente, pero volvemos a lo mismo, con la introspección del mismo Mises y seguidores, que no necesariamente coincidirá con la introspección de otros científicos de la Economía, y/o con la ulterior experimentación de laboratorio neuroeconómica. 

Nuevamente... la realidad es algo relativo e ilusorio, nos dicen Capra y Steindl-Rast en su libro "Pertenecer al Universo" (1993). Está comprobado que actuamos de manera ingenua cuando creemos que aquello que percibimos es la realidad absoluta. Y si bien Mises critica muy bien la utopía econo-matemática de predecir todo con supuestos bastante discutibles (homo economicus), el mismo Mises intenta extrapolar su propia lógica económica introspectiva individual, a todos los seres humanos, en todo tiempo y lugar. O sea, quizás hasta más pretencioso aún que los econo-matemáticos.

Inclusive el mismísimo Hayek, otro destacado austríaco, criticaba a Mises en Economics and Knowledge argumentando que para entender cómo los sistemas sociales tienden hacia el equilibrio se debe conocer los mecanismos de formación de expectativas humanas, es decir, lo que hoy la Neuroeconomía facilita, si bien no aún en las épocas de Hayek.

Pero que quede claro que la crítica no es solo a Mises, sino abarcativa a todos los grandes teóricos que desarrollaron teorías sociales en forma excesivamente introspectiva, vale decir, su propia e individual introspección, que no necesariamente coincide, con la de otros colegas, en todo tiempo y lugar. De esta forma, hoy no queda otra en Ciencias Sociales que buscar fundamento neuro para todas las viejas hipótesis que alguna vez se escribieron introspectivamente, ya sea en Economía, Sociología, Educación, Derecho, etc.

Concluyendo

La Neuroeconomía hoy se erige como una especie de tercera vía en metodología económica, parada entre medio de la Economía Austríaca y el dominante Modelo Neoclásico, tratando de dilucidar los mecanismos centrales que subyacen a nuestra toma de decisiones económicas, de alguna forma un poco más "imparcial", si se permite el término, de la que hasta ahora algunos economistas han utilizado: la econo-matemática (neoclásicos y seguidores) y/o la introspectiva (austríacos, entre otros).

Lisa Barrett, neurocientífica contemporánea, reflexiona que el cerebro está construido para percibir la realidad en función de lo que creemos, y no al revés; es decir "creer para ver" y no "ver para creer". Y ésto se aplica no sólo al mundo de los objetos y las relaciones personales, sino también a las teorías y procesos políticos y económicos, por eso existirán siempre derechas, centros e izquierdas, mal que le pese a los fundamentalistas, del bando que sean. De esta forma, hoy en día, y a la luz de las Neurociencias Cognitivas, confiar en la introspección tan execesivamente, al punto de no aceptar ningún intento de validación empírica al estilo Mises, no estaría teniendo demasiado sustento.

Fuentes
Autor: Sebastián Laza, economista, autor del libro Neuroeconomía, Disrupción y Cambio (2018).

https://www.amazon.es/NEUROECONOM%C3%8DA-DISRUPCI%C3%93N-CAMBIO-SMITH-D-KAHNEMAN/dp/198084397X/ref=tmm_pap_swatch_0?_encoding=UTF8&qid=&sr=

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